Artículo del portavoz de Podemos Alcobendas, Eduardo Andradas, sobre el rock en la localidad
En Alcobendas siempre gustó el guitarreo eléctrico y por ella pasaron los Leño, Panzer, Barón Rojo o Medina Azahara en los ochenta. Míticos “Garitos” como el Caballo de Acero, el Pantera, el Cherokee o el Búho para escuchar un poco de rock o unas cucharadas de Punk. Como no señalar el programa del “Trovador Urbano” en Radio Utopía, pía, pía, pía… como se publicitaba en esa época o nuestro “Madrid Rock” - Mordiscos- , esa primeriza tienda musical en donde encontrar casete de Heavy y no tener que bajar a Madrid o a Continente a por ellas.
Grupos de música como Hormigón, La Banda de Jack Daniels, Desidia, URBAN69, Los Desenkajados, PDT, La Gotera, Asako, Saqueadores de Conventos, Niño Robot o más Poperos como Serie Limitada. Y por supuesto Los Sublevados, cuando el Rock and Roll local se hizo peninsular de la mano de José, Sergio, Apachete y “el pelos”.
Por aquí en los noventa del siglo pasado dejaron presencia en el escenario Platero y Tú, Dover, M.C.D o Vantroi, ya fuera en el ya citado Caballo de Acero o en el festival anual de Radio Utopía en el Parque Cataluña.
Del barrio más obrero de Alcobendas, nació un grupo que junto, punk pegadizo con música rock a veces más kalimotxera, Los Kaos Urbano, con la voz potente y ruidosa de David González “El Sku” y por allá por 1995 comenzaron a escucharse en los locales del municipio. Uno de sus baterías coyunturales Diego, hoy da baqueta en el grupo Núcleo Terco. También por los tambores paso el “Koke”, hoy está en manos de Rubén “El Peke”.
Tras pasar por Venezuela, México (varias veces), Guatemala, Chile, Costa Rica, Colombia, Canadá, Gran Bretaña, Francia, Italia o Alemania y pisar fuerte las tablas de todas las provincias del estado español , llenar espacios con 10000 personas en un concierto o miles de discos vendidos después, Sku y Peke han sacado a la luz una especie de memorias con bulla. Estos dos vecinos de esta ciudad desgranan sus principios, continuaciones, anécdotas y opiniones sobre 27 años con la guitarra y la canción a cuestas. Todo el vivir lo cuentan en “Los Hijos de la Calle” de la editorial Potencial Hard Core, imprescindible parte de la historia de la música de Alcobendas.
Desde estos párrafos recomiendo esas páginas de buen punk-rock y de la vida que existe tras ello. Y recordar que esa Alcobendas del rock fue desapareciendo con un poco de ayuda de la institución y sus mandatarios políticos en la primera década de este siglo XXI, pero todavía existen numantinos que mantienen la antorcha del Rock en alto. Larga Vida al Rock and Roll!
Comments