Se diagnostican alrededor de 3.600 casos anualmente en España, según la asociación ASACO
Diario de Alcobendas entrevista a Charo Hierros, presidenta de la asociación ASACO (Asociación de Afectados por Cáncer de Ovario) para informar sobre la situación del cáncer de ovarios en España y la necesidad de detectar de manera precoz la posibilidad de desarrollar esta enfermedad. Es un equipo de voluntarias que han sufrido o superado el cáncer de ovario o ginecológico y lo hacen de manera voluntaria y altruista.
- ¿Qué objetivos tiene la asociación? ¿Cómo llevan a cabo estos objetivos?
Los principales objetivos son dar apoyo a las socias y sus familiares, dar visibilidad al cáncer de ovario y los cánceres ginecológicos así como apoyar la investigación. Estos objetivos se llevan a cabo por la asociación mediante las redes sociales y su página web para las pacientes de ASACO, también hay programas de ayudas, hay uno que destaca que es el proyecto bienestar. En este proyecto se ofrecen servicios gratuitos de psicología y fisioterapia. Los servicios de fisioterapia son exclusivos para los pacientes y los de psicología son para pacientes y familiares que lo necesiten. También tenemos talleres de relajación, de mindfulness y otro proyecto de escritura terapéutica que ya se está realizando la segunda edición y se publicará un libro con relatos de la primera edición de las participantes que han querido publicarlos. Las jornadas que organizamos son para dar visibilidad y que las mujeres conozcan estas enfermedades, los síntomas y sean capaces de diferenciar con problemas digestivos que pasan desapercibidos. Este hecho da lugar a diagnósticos de cáncer ya muy avanzados. Uno de los objetivos es que este tipo de enfermedades se operen en centros especializados por expertos ya que es una cirugía de muy alta complejidad y agresivos. Por esta razón estamos en todo momento realizando campañas, ofreciendo información, atendiendo llamadas de todas las personas que quieran nuestro servicio de apoyo.
- ¿Qué porcentaje de población sufre este tipo de cáncer, es muy común?
El cáncer de ovario en particular afortunadamente no es muy común, se diagnostican alrededor de 3.600 casos anualmente en España. El cáncer de endometrio, que afortunadamente tiene un mejor pronóstico y que sí se puede identificar más fácilmente y se identifica de manera más temprana dobla los casos, cerca de 7.000 casos anuales. El cáncer de cérvix es mucho menor la incidencia, aproximadamente de 1.500-1.600 casos anuales gracias al cribado y la vacunación que existe hacia el VPH (Virus de Papiloma Humano) es un cáncer que se puede abordar de manera más sencilla. En el caso de cáncer de vulva y vagina afortunadamente en España hay muy pocos casos y que se pueden detectar antes. Exceptuando el cáncer de ovario los demás cánceres tienen un pronóstico y un abordaje mucho más positivo.
- ¿Se puede hacer vida normal?
En el caso de cáncer de ovario, si el paciente se está sometiendo a la quimio tras una operación, que está considerada muy agresiva, la paciente puede hacer vida normal solo después de la operación y pasados un plazo de tiempo. En todo caso el tiempo de recuperación es relativo y cambia dependiendo de la persona. Ya que es de alta complejidad, que está a la altura de un trasplante de órganos e incluso la retirada total del sistema reproductivo femenino. Se están haciendo muchos avances en el ámbito de medicamentos y eso puede favorecer la rapidez de la recuperación y la vuelta a la normalidad. En todos los casos hay que seguir teniendo en cuenta los consejos y las amenazas que conllevan el tratamiento y su óptima recuperación.
Por último, ¿qué puede hacer un familiar o un amigo para ayudar a estas personas?
La familia y los amigos en el entorno de la paciente es muy importante, por esta razón la asociación en el proyecto bienestar incluye a los familiares ya que el impacto en todos los sentidos es de gran calibre. Tanto al saber de la noticia y el proceso de asimilación como en el proceso del tratamiento. En este caso lo que la familia puede hacer es apoyar y buscar apoyo y procurar normalizar la situación en la medida de lo posible ya que es algo que hay que aceptar y afrontar para incorporarlo al día a día. El impacto emocional es tremendamente duro debido a que algunas mujeres se someten a la extirpación total del sistema reproductivo y necesitan apoyo en todos los sentidos.
